Me atrapó desde el inicio Cuerpos marcados; la lectura comienza con las palabras de Gloria Anzaldúa y Audre Lorde, poetas y escritoras en Esta puente, mi espalda. Es una buena señal que un libro que retoma los aportes del feminismo materialista francés inicie con la cita de dos inmensas referentes del feminismo negro, chicano, migrante.
Sin dudas, este material es audaz y desafiante para el momento que hoy transitan los feminismos en nuestra región, donde urge una crítica a los feminismos clásicos y occidentales, de los cuales hemos aprendido pero también cuestionado. Audaz en el sentido de traer nuevamente estos aportes para repensar el rol de los feminismos en las transformaciones de las desigualdades estructurales. Una propuesta que pone en juego los aportes del materialismo y que enriquece también el accionar de los feminismos a partir de la crítica a la colonialidad, al racismo y al capitalismo.
Cuerpos marcados es esa puente para unir pensamientos, acciones y deseos de transformación de aquellas francesas materialistas y de esas (estas) chicanas, asiáticas y afrodescendientes que también fueron sostén y espalda.