Me llevó años pronunciarme con absoluta convicción a favor del aborto legal, seguro y gratuito: años de anécdotas de mujeres cercanas que tuvieron que abortar no en condiciones aberrantes, pero sí riesgosas para su vida y, en algunos casos, de mucha humillación y bastardeo por parte de los propios profesionales de la salud que las atendieron.
Entonces me hubiese gustado que un libro como este, Código Rosa, cayera en mis manos. Entonces y ahora también, por supuesto. Saber que podés abortar en tu propia casa, acompañada de quien quieras o, si querés estar sola, del otro lado de la línea telefónica hay Rosas que te escuchan y te apañan. Conocer distintas historias, distintas razones por las cuales una mujer decide no seguir adelante con un embarazo y comprender a cada una.
Código Rosa hubiera hecho más libre y menos temerosa mi adolescencia. Y seguramente hará más libres y más valientes las cabezas de todas las mujeres de cualquier edad que se zambullan en sus páginas.
Fragmento del prólogo de Selva Almada