Este pequeño diccionario es un trabajo grupal que busca acercar la magia de Corea a nuestro rincón del mundo.
¿Nunca les pasó que no podían expresar sus emociones? ¿O querían a alguien, pero lo que sentían no era exactamente amor? La lengua coreana tiene palabras específicas para esos sentimientos.
En este libro ilustrado se recopilan esas y muchas otras que muestran una percepción lingüística del mundo muy distinta a la nuestra, pero al mismo tiempo universal.
Con bellísimas ilustraciones de Florencia Kaneshiro y caligrafía de Jiye Kim.