Una mujer, una artista, una madre. Adelaida Gigli fue una de las figuras más sorprendentes del siglo pasado en la Argentina. Dispuesta a esconder armas y disidentes en su casa, a reírse en la cara del poder, a rebelarse contra las convenciones y a mostrarse exuberante e irreverente, tuvo que pagar
en su propia piel el horror de la censura, la dictadura y la pérdida. Nacida en Recanati en 1927, hija del pintor Lorenzo Gigli, llega al país cuando su familia decide abandonar Italia durante el fascismo. Junto a su marido David Viñas forma parte del núcleo fundador de la mítica revista Contorno. Tiene dos hijos, Mini y Lorenzo, militantes de Montoneros, ambos desaparecidos: ella en 1976, él en 1980. Tras el golpe de 1976, Adelaida se ve obligada a abandonar Argentina para regresar a su Recanati natal, donde inicia una nueva vida artística y personal. Con afecto y gracia, Adrián N. Bravi recorre la vida de una mujer excepcional, a la que llegó a conocer y de la que fue confidente. En esta novela biográfica aparece nítida la formidable humanidad de Adelaida, mientras la escritura opera sobre el poder de la memoria, el afecto y la resistencia contra todo intento de olvido