1 cuota de $15.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $15.000 |
3 cuotas de $5.394 | Total $16.182 | |
6 cuotas de $2.902 | Total $17.412 | |
9 cuotas de $2.080,83 | Total $18.727,50 | |
12 cuotas de $1.677,75 | Total $20.133 | |
18 cuotas de $1.970 | Total $35.460 |
6 cuotas de $3.405,50 | Total $20.433 | |
12 cuotas de $2.263,75 | Total $27.165 |
1 cuota de $15.000 sin interés | CFT: 0,00% | TEA: 0,00% | Total $15.000 |
Una pila de libros y un cuaderno en la mesita de luz abren un diario de sueños que funciona como un faro para mirar adentro de la noche.
Un diálogo con la literatura sobre los sueños para construir un diálogo sobre la recuperación de lo propio.
Lo real y la fantasía, la vida despierta o la vida después de la oscuridad. Este libro es, de alguna manera, una guía para entrenar la vista o, en algunos casos, restaurarla. El ensayo de una reparación y de un descubrimiento.
En el espacio sin reglas de lo onírico, Noctámbula traza el mapa de un territorio donde el tesoro es una frontera. Emilia la cruza y el mundo tangible se desarma para volverse a armar en un sentido necesario: el repaso por los sueños de una mujer. Una fuerza que ubica el deseo en primer plano.
Una escritura para no olvidar y, también, para no hacer. La acción hace que el sueño se borre, entonces la escritura es una continuación del estado en el que todo es posible, ¿por qué querríamos salir de ahí?
Noctámbula hace del sueño una nueva forma de vigilia. Como dice Lispector, capta esa otra cosa que te digo porque yo misma no puedo. ¿Cómo encontrar en la escritura el canal para ver lo invisible?