Hallar la propia identidad no es solo descubrir el origen concreto de nuestra existencia sino el modo en que nos paramos en el mundo cada día. Esta primera novela de Esteban Godoy da pleno testimonio de esa búsqueda. A través del candor y la valentía de su protagonista, y el elenco de personajes entrañables que lo acompañan, el autor nos involucra en una historia que conmueve por tan íntima y desesperada, tan divertida y dolorosa; y nos regala de paso, gracias a su habilidad literaria, la singular observación de lo que pudo haber significado ser joven –y sensible– en la Argentina de las últimas décadas.
Alejandra Laurencich
Nadie a quien esperar es una novela notable, una novela de iniciación de un escritor que, sé muy bien (y acá se nota perfectamente), tiene muchísimo más para darnos. Un escritor de raza, un buscador nato, un artista capaz de regalarnos una alegría imperdible: la alegría eterna de los momentos de belleza. Si usted está leyendo estas líneas tenga en cuenta que no solo tiene un libro en sus manos, sino otro mapa necesario de los tantos laberintos secretos que alberga el alma humana. No lo suelte.
Pablo Ramos